Estamos a un mes de la celebración de la segunda etapa presencial del sínodo de la sinodalidad. Recordemos que este sínodo fue convocado por el Papa Francisco en 2021 y ha pasado por varios momentos: (1) La consulta al Pueblo de Dios; (2) Los encuentros continentales, (3) la Primera Asamblea presencial en Roma en octubre del 2023 y (4) la Segunda Asamblea presencial en Roma en octubre 2024, a la que nos estamos refiriendo.
En este largo proceso, se han publicado diversos documentos: (1) Documento preparatorio; (2) Documento de trabajo para la Etapa Continental; (3) Documentos finales de las Asambleas continentales; (4) Instrumentum Laboris para la Primera Sesión de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos; (5) Informe final de dicha Asamblea y (6) Instrumentum Laboris para la segunda sesión de la XVI Asamblea Ordinaria del Sínodo de Obispos (octubre 2024).
Comisiones ya activas
(1) Relaciones entre las Iglesias orientales católicas y la Iglesia latina;
(2) La escucha del grito de los pobres;
(3) La misión en el entorno digital;
(4) La revisión de la Ratio fundamentalis Institutionis Sacertotalis en perspectiva sinodal misionera;
(5) Cuestiones teológicas y canónicas en torno a formas ministeriales específicas;
(6) La revisión, en una perspectiva sinodal y misionera, de los documentos sobre las relaciones entre Obispos, Vida Consagrada, Agregaciones eclesiales;
(7) Algunos aspectos de la figura y del ministerio del Obispo en una perspectiva sinodal misionera;
(8) El rol de los Representantes Pontificios en una perspectiva sinodal misionera;
(9) Criterios teológicos y metodologías sinodales para un discernimiento compartido sobre las cuestiones doctrinales, pastorales y éticas controvertidas;
(10) La recepción de los frutos del camino ecuménico en la praxis eclesial.
Los resultados de los estudios de estas comisiones serán presentados a mediados del año 2025.
Documento de trabajo de esta próxima sesión de octubre.
Consta de una Introducción que recoge los tres años de camino realizado y el ofrecimiento de este documento como herramienta de trabajo para esta segunda sesión.
Las tres partes que constituyen el cuerpo del documento pretenden iluminar la vida sinodal misionera de la Iglesia desde tres perspectivas: (1) Las relaciones eclesiales, carismas y ministerios, iglesia y mundo;
(2) la perspectiva de los caminos que sostienen y alimentan en lo concreto el dinamismo de las relaciones: la formación integral, discernimiento eclesial, articulación de procesos de toma de decisiones, transparencia, rendición de cuentas, evaluación;
3) los lugares que hablan de la realidad de los contextos en los que se encarnan las relaciones: territorios, Iglesias locales, vínculos que conforman la unidad, el servicio a la unidad del Obispo de Roma. El documento concluye afirmando la Iglesia sinodal en el mundo.
El énfasis para esta Segunda Asamblea es responder a la pregunta: ¿cómo ser una iglesia sinodal misionera?
Además, la iglesia sinodal misionera es aquella que está dispuesta a evangelizar en este mundo actual con todos los desafíos que conlleva. Pero aquí también, para algunos, es suficiente lamentarse de la secularización del mundo actual y contentarse con reforzar “lo que siempre se hizo así”, en el afán de visibilizar a la Iglesia en estos tiempos donde ella ha dejado de interesarle a muchos.
Convendría preguntarse qué tanto estamos dispuestos a entender los signos de los tiempos para responder a ellos con creatividad y audacia, “sin miedo a herirnos y macharnos” -como dijo el papa Francisco en su primera Exhortación Evangelii Gaudium- para mostrar la actualidad de la Buena Noticia del Reino para el aquí y ahora de nuestro tiempo.
En definitiva, será muy importante que acompañemos este proceso sinodal, implicándonos en él, acompañando las noticias que vayan surgiendo y, por supuesto, con la oración por este acontecimiento eclesial pero, sobre todo, cómo ya lo dijimos antes, buscando entrar personalmente en este proceso, comenzando a hacer los cambios necesarios en nuestra propia experiencia de fe y en la comunidad eclesial de la que participamos para que la Iglesia actual se renueve y pueda ser, en verdad, Buena Noticia, para nuestros contemporáneos.
Primera sesión
UNA IGLESIA SINODAL EN MISIÓN
PARTE I - EL ROSTRO DE LA IGLESIA SINODAL
1. La sinodalidad: experiencia y comprensión
2. Reunidos e invitados por la Trinidad
3. Entrar en una comunión de fe: la iniciación cristiana
4. Los pobres, protagonistas del camino de la Iglesia
5. Una Iglesia de "toda raza, lengua, pueblo y nación"
6. Tradiciones de las Iglesias orientales y de la Iglesia latina
7. En camino hacia la unidad de los cristianos
PARTE II - TODOS DISCÍPULOS, TODOS MISIONEROS
8. La Iglesia es misión
9. Las mujeres en la vida y en la misión de la Iglesia
10. La vida consagrada y las asociaciones laicales: un signo carismático
11. Diáconos y presbíteros en una Iglesia sinodal
12. El Obispo en la comunión eclesial
13. El Obispo de Roma en el Colegio de los Obispos
PARTE III - TEJER LAZOS, CONSTRUIR COMUNIDAD
14. Una aproximación sinodal a la formación
15. Discernimiento eclesial y cuestiones abiertas
16. Por una Iglesia que escucha y acompaña
17. Misioneros en el ambiente digital
18. Organismos de participación
19. La reagrupación de Iglesias en la comunión de toda la Iglesia
20. Sínodo de los Obispos y Asamblea eclesial
PARA PROSEGUIR EL CAMINO
Presentada la segunda sesión del Sínodo.
El Sínodo es un tiempo de oración; para escuchar la Palabra de Dios y el Espíritu y también una oportunidad para implorar el perdón de Dios por los pecados de la Iglesia.
El pecado del abuso; el pecado de la guerra; el pecado de la indiferencia ante el drama presente en el fenómeno creciente de todas las migraciones.
Reconocerse parte de aquellos que por omisión o acción se convierten en causa de sufrimiento, responsables del mal que sufren los inocentes e indefensos».
Ell pecado contra la paz; el pecado contra la creación, contra los pueblos indígenas, contra los migrantes; el pecado de los abusos; el pecado contra la mujer, la familia, los jóvenes; el pecado de la doctrina utilizada como piedra para ser arrojada; el pecado contra la pobreza; el pecado contra la sinodalidad / falta de escucha, comunión y participación de todos. Al final,
Temas importantes
ü El Pueblo de Dios, sujeto misión»
ü «El papel y la autoridad del Obispo en una Iglesia sinodal»
ü «Las relaciones mutuas entre la Iglesia local y la Iglesia universal»
ü El ejercicio del primado y el Sínodo de los Obispos